Más de 50.000 israelíes rindieron homenaje el jueves ante al féretro expuesto en el Parlamento israelí, cubierto con una bandera nacional y custodiado por una guardia de honor.
Un centenar de jefes de Estado y de Gobierno, líderes de todo el planeta, han acudido a rendir homenaje al expresidente "de la Paz", así lo ha calificado Felipe, el rey de España.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, cerró con un discurso la ceremonia fúnebre en la que también estaban presentes el ex presidente norteamericano Bill Clinton, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el jefe del Estado, Reuvén Rivlin, o el escritor israelí Amos Oz.
"Simon defendía con determinación que la paz era la auténtica seguridad. Si había paz, habría seguridad", expresó Netanyahu.
Cabe destacar que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu y el presidente palestino Mahmud Abbas se han estrechado la mano antes del funeral.
"Encantado de volver a verle, hacía mucho tiempo", dijo Abbas a Netanyahu, ambos intercambiaron algunas palabras.
Sin duda alguna a Simon Peres le hubiera gustado ver el apretón de manos que se dieron durante la ceremonia Netanyahu y Abbas.