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El Ecuador se ha convertido en el Estado "pária" del mundo, después de haber violentado la Embajada de México en Quito para detener al exvicepresidente Jorge Glas, acusado de un supuesto peculado y que el Gobierno mexicano al estudiar su caso jurídico lo considera una persecución política e inmediatamente le concedió asilo político.
Ecuador siempre fue calificado como un país bananero. Ahora se ha convertido en un "pária", un país excluido de las ventajas y el respeto que gozan los demás, e incluso de su trato, por ser considerado inferior. El Ecuador es "un país sin Dios y sin Ley", donde policías, militares y funcionarios del Estado tienen vínculos con organizaciones criminales y de narcotráfico, donde también te asaltan, secuestran y matan, es de terror.
El mundo ha condenado lo ocurrido en estos últimos días en Ecuador, donde cobardes uniformados arrastran y golpean a un representante diplomático mexicano, un hecho que podría calificarselo como una acción de guerra, que para suerte del inocente pueblo ecuatoriano, México no es un país limítrofe, caso contrario por estas horas estaríamos hablando de una respuesta militar por parte de la nación agredida.
Demostrando su alto grado cultural y como un gran pueblo civilizado, después de romper relaciones diplomáticas, México ya ha iniciado el trámite para demandar al Ecuador y sus autoridades ante la Corte Internacional de Justicia, por lo ocurrido en su sede diplomática en la capital ecuatoriana.
